La parada estaba cerca del Sol (la puerta del, no el astro) y atravesarla fue realmente complicado.... colas monumentales para comprar lotería en ciertos sitios, que digo yo que todos los números entran en el bombo (eso espero)... una novia en manga corta (aseguro que hace un frío de pelotas) haciéndose fotos delante del árbol de Navidad y una amalgama de cosas sin ningún sentido...
Pero bueno, el objetivo es el cine, Biutiful y Bardem... el cine (8 euros, ni más ni menos) pasa a ser un campamento base en Laponia, frío terrible, la señora de detrás se pasa 20 minutos (de reloj, no de periódico) abriendo un caramelo, que me dan ganas de abrírselo yo y otra coge el teléfono como si estuviera sentada en el sofá de su casa... que digo yo que va a volver a una sala su padre.... eso sí, Bardem espectacular... si al salir me lo hubiera encontrado le hubiera abrazado... (vamos, que lo haría allá donde me lo encontrara... que nunca lo hice y eso que vivía en mi barrio)... Espero que le reconozcan el trabajo hecho... y esto lo digo con un nudo en el estómago, porque la película no es precisamente una comedia romántica....
Y con las mismas y ante la imposibilidad de caminar por una Gran Vía abarrotada emprendo viaje de vuelta a casa. 20 minutos esperando al bus... que si hubiera caminado hubiera llegado antes... y sólo pienso en mi moto... que me hubiera transportado divinamente....
Y con esto solo decir que, al menos hasta mediados de enero, una menda no vuelve al centro, se pongan como se pongan.... y es que si no lo digo, reviento...
Estás loca!!! Yo no piso el centro estos días ni harta de todo... y menos a esas horas, y menos para pagar 8€ para ver una peli, y menos, si sale Bardem... Creo que a mi me provoca una reacción contraria a la tuya. Claro, para gustos, los colores... aunque confieso que he escuchado buenas críticas.
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