sábado, 5 de febrero de 2011

Y mira que me costó...

Tuve muchas dudas a la hora de comprarme el iPhone, le di

millones de vueltas hasta que, una buena mañana, simplemente

me levanté y dije: hoy es el día. (Joder, parece que estoy dejando de fumar...)

Me cambié de compañía y ahora

tengo un flamante teléfono móvil... aunque en realidad lo menos

importante es que sea un teléfono, es más, estaría igual de

encantada si no tuviera función de telefonía...

lo único que tendría que llevar otro aparatejo en el bolso.

Hago uso de millones de aplicaciones, me entero de lo

que pasa por el mundo, voy conectada al trabajo,

a las redes sociales... pero, sobre todo, tengo una fantástica

cámara de fotos siempre a mano para plasmar aquello

con lo que me topo... luego, en algunas ocasiones,

me dedico a jugar con estas fotos, y salen cosas la mar de interesantes....

Hace un tiempo decidí imprimir algunas de esas fotos,

a modo de prueba, en un tamaño de 9 x12, relativamente

pequeño, y todos ellas con un margen blanco...

el resultado me parece perfecto y he repetido en

varias ocasiones el mismo proceso....

Y este es, precisamente, el texto que aparece

manuscrito en blanco sobre cartulina negra

en la primera página del enorme "cuaderno"

en el que voy distribuyendo las fotos.



1 comentario:

  1. Pero tendrá que ser enorme porque con la cantidad de fotos que haces...

    ResponderEliminar