viernes, 20 de marzo de 2020

La ventana indiscreta, coño

La televisión es verdaderamente insufrible... porque como te dediques a verla varias horas seguidas, sí que te da un parraque... sobre todo por la estupidez humana...
Y claro, una buena forma de pasar el tiempo (o así lo considero yo) es dedicarte a observar lo que sucede dentro del horno (aunque la factura de la luz se dispare) o bien, tipo Hitchcock, observar la vida por la ventana... Y lo que más llama la atención  es que la gente que camina por la calle siempre es la misma... parece increíble, pero es cierto. Y no, no hablo de los que llevan perros que, vivirán en la zona, y deben sacar al perro a la calle... Es especial recuerdo a una señora, que mire a la hora que mire, acaba pasando... Y no, no lleva mascarilla, ni guantes ni bolsa de la compra... da un paseíto. Señora de edad avanzada... que no, COJONES, que no nos hemos enterado. Que salir a la compra no es salir todos los días porque veo que me falta un poco de nuez moscada... es hacerlo única y exclusivamente cuando es necesario... No hace falta cocinar con todos los ingredientes del mundo, es que hay que echarle imaginación... y además, eso supondrá un ahorro económico... que no, COÑO, que no... que esto se toma en serio o nos vamos a la mierda... aunque, por otro lado, bajarán mucho la listas del paro...
Y a lo que se han ido de puente o de vacaciones a ver el mar... que lo disfruten, no vaya a ser la última vez que lo hagan.

Voy a pintar
(Y hagan pan en casa... entretiene mucho, es francamente satisfactorio comer un pan hecho por uno mismo y las horas pasan más rápido... Y así no tienes que salir a por pan todos los días... que además, reconócelo, no lo sueles hacer a diario).





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